El nacimiento

Érase una vez en la vida de las Pacho que, en una de sus miles de conversaciones diarias decidieron dar a conocer a un mundo más allá de Zuckerberg (que todos sabemos que está en su sillón con una copa de coñac leyéndonos y haciendo maldades con nuestra información) las idas de olla super trascendentales que ocurren en el maravilloso mundo chat. Y así empezó todo...

S.- Me van a dar un premio a la mayor generadora de basura virtual...

E.- Yo tambien genero basuras virtuales... puf.

S.- Tú solo generas una... Ah no! Uffquerollo...

E.- Como mínimo dos, más todas las bobadas facebook y listas de spoti chorrescas...
S.-  Vivimos para el internete. Internet no es nada without us.

E.- Claramente no. Somos unas pequeñas hormigas en esta spiderweb. Nos tragará la araña.
S.- O nos dará un plato de sopa, vete tú a saber.
E.- ¿Es una araña abuela que viene con pisto?
S.- Yo creo que sí...

La historia se pone peliagudamente emocionante, una vez que entran en juego las arañas las Pacho se escalofrían instantáneamente y al unísono, cada una tras su pantalla.

E.- Mi ordenador se come los marcadores... Yo guardo las cosas en favoritos y es mentira luego.
S.- Igual se los come la araña. O los echa al pisto.

Basta de arañas. Al turrón. ¿Cómo se llega a un nombre de blog tan fantabuloso como Las Caries de las Pacho?

S.- ¿Cómo lo llamamoooos?
E.- Uhmmm... Pacho's dialogues. Pachi y Pacho. Rosi y Azuli.
S.- Me parece bien Rosi y Azuli. Y Domingo y Dominga.

                      Unos parientes de Rosi y Azuli.

Como el desvarío la creatividad está en el ambiente, el siguiente paso es escoger plantilla, como todos sabéis, queridos lectores. Después de mirar unas cuantas, las Pacho se quedan fascinadas con una que tiene gatos vestidos a rayas y a topos y con corazoncitos alrededor.

E.- Ese de los gatis me encantaaaaaaaaa!
S.- ¿Es muy moñis? Que yo no distingo... - S. tiene un carácter feliciano basado en el rosa y las canciones pop, así que hay que ayudarla con el moñismo a veces.
E.- Es moñis. Pero es mono. Además, ¿qué queremos?
S.- No sé, ¿Qué queremos?
E.- Son nuestras chorradas las que vamos a poner. Y ese de dos gatis que se aman somos como tú y yo.- A veces E. también tiene el moñis subido.

Como veis, la elección fue diferente. La plantilla definitiva nos conquistó al grito de Izidodo loz fideoz*.Y el nombre, también. Pero esta historia, para otra ocasión.

 *Nota: Isidoro era un gato callejero naranja al que S. perseguía cuando era una pequeña desdentada con un cazo de sopa que percutía contra el suelo en un pueblo muuuuuy tranquilo. Por todos los callejones se oía la voz de un mico: "Izidodo loz fideoz!!!!" seguido de unos golpes metálicos. El pobre Isidoro aún no ha salido de lugar donde se escondió.

Fin de la conversación.